jueves, 22 de agosto de 2013

Fallé en mi intento por mejorar mi alimentación

Siiii, recaí, volví a las canes rojas, embutidos, dulces y mi bebida preferida, LA LECHE. Se supone que si retiraba este tipo de alimentos de mis comidas diarias mi olor disminuiría porque tal como lo dijo el dermatólogo y lo con encontré en diversas fuentes en la web, todos estos alimentos favorecen el desarrollo de malos olores. Pero a mi no me fue muy bien con eso, en casi un mes que me abstuve de todos esos alimentos no encontré ninguna diferencia en mi olor corporal y eso que estaba utilizando los medicamentos recomendados por el dermatólogo (pero eso es algo de lo que no quiero hablar ahora), el hecho es que los cambios en mis hábitos alimenticios no me sirvieron de mucho. Tal vez me rendí muy rápido, tal vez era mejor esperar un tiempo más, pero la verdad es que ya no podía resistir la tentación de no comer carne ni de tomar leche. Además que al retirar estos alimentos de mi dieta prácticamente no podía comer nada, me la pasaba comiendo galletas y eso que tienen leche y huevo, y tomando agua, que también es recomendada para disminuir los malos olores.

De todas formas aquí les dejo una lista de alimentos que recomiendan retirar de la dieta para evitar malos olores:
*Cebolla, ajo, especias fuertes.
*Leche, huevo, queso.
*Carnes rojas, embutidos.
*Alimentos con grandes cantidades de azúcar.
*Café y alcohol.

Y además de eso tomar mucha pero mucha agua y comer frutas y verduras en abundancia.

Bien dicen por ahí que somos lo que comemos.



domingo, 4 de agosto de 2013

Primer año del blog‏

Hoy nuestro blog cumple un año desde su creación. Hace exactamente un año creí que todo había cambiado, que había superado la bromhidrosis, para mi el olor no volvería nunca. Sin embargo nada fue tan perfecto y las cosas siguieron igual que antes. Pero gracias a eso cree este blog que me ha permitido desahogarme, ayudar y conocer a nuevas personas. Ha sido un año lleno de lucha y de muchos intentos por superar esta enfermedad que me aqueja hace 11 o 12 años. He aprendido pero también he sufrido mucho. Agradezco a todas las personas que se han animado a escribirme y a contarme sus experiencia. Un abrazo para todos los lectores y esperemos que para el próximo año estemos curados de esta enfermedad.